BOMBERO QUE SE REALIZA UN TRANSPLANTE DE ROSTRO DICE QUE AHORA SIENTE ESPERANZA
Ahora Patrick Hardison puede nadar en una piscina, pasarse la mano por el cabello y guiñar los ojos. También puede caminar a través de multitudes sin que extraños se queden señalándolo o sin asustar a los niños.
Hace poco más de un año, este bombero voluntario de 42 años no podía hacer ninguna de estas cosas. Su rostro estaba gravemente desfigurado.
Hardison sufrió extensas quemaduras faciales después de sobrevivir a un incendio en 2001 en Senatobia, Mississippi. En el evento, perdió los párpados, las orejas, los labios, el cabello y gran parte de la nariz. Hasta el año pasado, usaba gorra y gafas de sol para cubrir sus cicatrices y ocultarse del mundo.
La cirugía lo cambió todo
Todo eso cambió el año pasado, cuando Hardison se sometió al mayor trasplante de tejido blando jamás hecho. La operación le devolvió la vida, dijo el bombero.
"Ahora tengo esperanza, y quiero ayudar a aquellos que han sufrido accidentes y decirles que hay esperanza para ellos también", dijo Hardison en una conferencia de prensa el miércoles pasado.
El Dr. Eduardo Rodríguez dirigió un equipo de más de 100 cirujanos y profesionales de la medicina en el New York University Langone Medical Center en la histórica cirugía de Hardison.
Donador
Para la cirugía se utilizó la cara de David Rodebaugh, un mecánico de bicicletas de 26 años de Brooklyn, que murió en un accidente de bicicleta. Todos sus órganos fueron liberados para donación. El trasplante de piel de la cara llevó 12 horas.
Rodríguez y su equipo dieron Hardison una nueva cara, cuero cabelludo, orejas y canales auditivos. También seleccionan partes del hueso de la barbilla, las mejillas y la nariz entera. El bombero también recibió nuevos párpados y músculos que controlan el parpadeo del ojo. Desde entonces, han sido 71 operaciones reconstructivas.
Fuentes: CNN , BBC
Imagen: New York University Langone Medical Center