¿Con qué sueñan los que matan?

Detrás de cada asesino hay un llamativo mundo onírico y aunque estos relatos no tienen injerencia en las causas, en más de una oportunidad aparecen reflejados en las pericias psiquiátricas. Estas pulsiones del inconsciente sirven también para descubrir los tormentos y obsesiones de los acusados. Repasamos casos emblemáticos de criminales argentinos.

1- Arquímedes Rafael Puccio. El líder del siniestro clan que secuestraba y mataba empresarios en el sótano de su casa, se soñaba joven, con la misma energía y mente, pero a los 20 años. También soñaba con las mujeres que habían pasado por su vida.

2- Carlos Eduardo Robledo Puch. Cumple cadena perpetua desde el año 1972 por haber cometido 11 asesinatos a los 20 años. La libertad es su sueño recurrente. Un guardia le decía que quedaba libre pero al salir de la cárcel descubría que se había desatado una guerra nuclear: era el fin de la humanidad.  

3- Nahir Galarza. Acusada de haber matado de dos tiros a su pareja Fernando Pastorizzo. La joven sueña que la persiguen y la quieren matar. Corre por una calle pero la persiguen varios hombres. Se esconde, pero la ven. La sensación le resulta desesperante.

4- Martin Lanatta. Condenado a cadena perpetúa en la causa del “Triple Crimen de la Efedrina”. Soñó que miraba una carrera de Fórmula 1 en un país árabe a donde se había fugado. En el sueño era sorprendido por su hijo, que lo abrazaba emocionado. Ese sueño fue tan real que con el tiempo averiguó que el lugar soñado podría ser el Reino de Bahrein, un país sin extradición que todos los años recibe a la Fórmula 1.

Según el perito criminal Enrique De Rosa Alabaster por lo general los acusados de cometer un asesinato no sueñan porque la naturaleza traumática del evento hace que lo cierren bajo la cobertura de barreras represivas. Soñar sería comprender el horror y en muchos casos los asesinos con perfil psicopático no tienen grietas que se develen en forma de sueños.

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Fuente: Infobae

Imagen: Shutterstock