Joven se suicida tras ser forzada a casarse y a probar su virginidad

Sabemos que en Oriente existen culturas que contrastan con las de Occidente y que nunca llegaremos a entender cómo en pleno siglo XXI, todavía se mantienen las “bodas arregladas”, que llevan a tragedias como la que le sucedió a Rajabbi Khurshed.

Rajabbi Khurshed, una joven de 18 años de Tayikistán (ubicado en la región de Asia Central), no conoció a su prometido Zafar Pirov hasta el momento en el que debían dar el "sí". 

Además del indignante test de virginidad que el gobierno obliga a hacerse a las mujeres antes de contraer matrimonio, Pirov le exigió que se hiciera otros dos para su seguridad, aunque ya estaban casados. Pirov no creyó en los resultados que indicaban que la joven era virgen, la acusó de mentirosa y exigió una segunda esposa.

La chica decidió acabar con su vida bebiendo una dosis letal de veneno, a los 40 días del matrimonio, con la persona que nunca antes había conocido. La familia de la joven dijo que la difunta en su lecho de muerte confesó haberse sentido bajo presión masiva por las demandas de Pirov, y que “No podía soportar más”.

Pirov podría pasar 8 años en la cárcel tras ser acusado de haber inducido a la mujer a esa horrible y trágica decisión. A pesar de ser considerado culpable, el chico se excusa diciendo que todo lo que hizo es completamente legal.

Las relaciones sexuales prematrimoniales son un tabú en una sociedad ultraconservadora como la de Tajikistán. En primer término los exámenes de virginidad fueron instaurados obligatoriamente en 2015 cuando se puso como excusa la lucha contra el HIV, la hepatitis y otras enfermedades.

Fuente: http://www.viralistas.com
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