¿Qué ofrece el mundo swinger que puede resultar tan adictivo?

Especialmente con la revolución sexual de la década de 1970, las prácticas swinger han evolucionado hasta establecerse como un verdadero estándar, al menos para una parte de la sociedad, que cada vez suma más adeptos. ¿Qué ofrece el mundo de los túneles oscuros de los boliches swinger, que resulta tan seductor y, en ocasiones, adictivo?

Prácticamente todos los clubes swinger cuentan con anfitriones, a modo de guías, que explican amablemente el funcionamiento del lugar y las reglas básicas de convivencia para novatos y primerizos. En la entrada al lugar, cada persona recibirá una pulsera fluorescente, que según su color indicará si el portador es soltero, o está con su pareja.

Una vez adentro, la gente baila y las barras de tragos se abarrotan. Con el correr de las horas, parejas y 'solos' dejarán las pista de baile para visitar los distintos salones oscuros, en donde todo, siempre que se quiera, está permitido.

Una vez que se probó, ¿es posible regresar del mundo swinger? La respuesta podría ser que sí, se regresa, pero uno ya nunca vuelve a ser el mismo. Se ha cruzado un límite; se vuelve, para no volver atrás.

Si en la primera experiencia swinger alguien no encontró lo que buscaba, por el motivo que fuere, entonces volverá para encontrarlo. En cambio, si lo encontró, volverá por más.

FUENTE: Clarín

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