La droga rosa de Colombia

Aunque muchos ya se olvidaron de ella, la cocaína rosada no es parte del pasado. Sigue circulando entre los jóvenes colombianos, sobre todo de los estratos más altos de la sociedad. Su color casi nunca varía, y el rosa sigue siendo el favorito aunque también existen presentaciones amarillas, lo que cambian son los ingredientes. Al cóctel básico tiene propiedades alucinógenas y estimulantes, le pueden agregar cocaína, heroína o químicos.

Pero el nombre real con el que circula ya no es cocaína rosada, sino 2CB, pronunciado “tusibi”, como en inglés. Para los menores de edad es “tusi” y si lo escriben en sus redes sociales, sustituyen la palabra por el emoticón de una billetera rosada. En Cali, los alumnos de algunos de los colegios más costosos, son quienes marcan la pauta en consumo de drogas, porque tiene acceso a mayores flujos de dinero.

El rector del colegio Jefferson, Juan Pablo Caicedo, aseguró que “el consumo de drogas es un problema real que no todos los padres pueden ver, y hasta en algunos casos prefieren mirar hacia otro lado". Y agregó que es fundamental visibilizar la problemática para buscar soluciones y no caer en el silencio y el ocultamiento, porque los jóvenes muchas veces no ven el verdadero daño que provoca el consumo de “tusbi”.

El investigador especializado en políticas de drogas, Alberto Sánchez, piensa que la clave es reforzar la información sobre los efectos del consumo de narcóticos y eficientizar los programas de prevención para mejorar los que existen en este momento. Y también es fundamental la intervención más activa por parte de los padres, las autoridades y la policía, por más que resulte complejo abordar este tipo de adicciones.

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Fuente: El Tiempo

Imagen: Shutterstock